La gastronomía de la familia

Estamos llegando a la segunda semana de estar en casa. Solos o acompañados, la mezcla de sentimientos nos embarga y nos remueve el corazón a diario. Cada día que pasa sabemos que estamos haciendo cuentas de cuántos días más estaremos recogidos, cuidándonos en casa, y qué más podrá cambiar para cuando volvamos a las calles. Lo sé, soy una romántica empedernida y creo que todos los colombianos estamos respetando la norma, así las muchedumbres que veo en los noticieros muestren otra cosa.

Nuestros días tienen nuevas dinámicas. Todos empezamos a asumir el trapero y la escoba como nuevos aliados estratégicos a la hora de empezar la jornada. La música sigue siendo nuestra compañera permanente para cualquier actividad que queramos hacer y nuestras ollas son el escape perfecto para toda la familia. Cada dinámica diaria nos reúne en torno a las comidas. Hemos recobrado el valor de encontrarnos en la cocina y en la mesa, de compartir las decisiones sin afanes frente a cada comida, y de poder transmitir historias sobre qué comíamos en nuestra infancia y cómo cada plato se fue convirtiendo en una insignia en la memoria de cada uno de nosotros.

La gastronomía ha hecho aflorar las más profundas relaciones que cada uno tenía con la comida, con sus raíces y con su memoria familiar. Se ha convertido, también, en una dinámica de redes sociales donde cada vez se encuentran más recomendaciones, menús y ayudas para los días que amanecemos aburridos de pensar qué preparar o dónde encontramos aquel antojo que tenemos y no sabemos cómo cocinarlo.

Creo que este encierro no ha salido del todo mal. Por el contrario, hemos recobrado valiosos espacios y conocimientos que nos alimentan hoy el alma y la barriga. Nos hemos enfrentado a la exaltación más pura de los sentimientos más entrañables, que son esas memorias de los bocados que hicieron historia en cada uno de nosotros. Además, rápidamente aprendimos qué vecino vende productos y alimentos, permitiéndonos ayudarlos a ellos con su economía mientras nosotros garantizamos no tener que salir tanto de nuestro círculo seguro.

Los invito a compartirme sus fotos y recetas vía Twitter en @chefguty. Estoy segura de que no solo me servirán a mí, sino que habrá muchísimas personas agradecidas. Comer siempre será el vínculo más fuerte de la familia para dialogar, construir y solucionar cualquier diferencia que tengamos.

#MadamePapita

@ChefGuty para El Espectador. Abril 3, 2020.

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